Entrenamiento para caminar con correa ….»Enseñar a su gato a caminar con arnés y correa es una excelente manera de permitir que su gato disfrute de estar al aire libre de forma segura.»
Entrenamiento para caminar con correa es una excelente manera de permitir que su gato disfrute de estar al aire libre de forma segura. También puede ser útil durante las visitas al veterinario, otros viajes necesarios o incluso cuando quiera presentarle otro gato de forma segura.
Antes de empezar a su entrenamiento para caminar con correa….
Antes de empezar a entrenarlo a caminar con correa, asegúrese de que su gato esté al día con todas las vacunas recomendadas y que tenga un microchip en caso de que se pierda.
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Por lo general, es fácil el entrenamiento para caminar con correa. Los gatitos tienden a prestarse más a esta nueva experiencia, pero los gatos adultos deben ser entrenados con paciencia.
Tome pasos pequeños en el entrenamiento y recompense a su gato por cada poco de progreso. Empiece a entrenar a su gato dentro de casa para que su gato llegue a sentirse cómodo con la correa antes de aventurarse fuera.
Entrenamiento para caminar con correa
- Compre un arnés diseñado para gatos, La hebilla debe estar en la parte posterior del arnés, no en el cuello.
- Deje el arnés y correa cerca de la comida o lugar preferido para dormir de su gato durante varios días. De esta manera su gato se acostumbrará a verlos y olerlos. El hecho de que estarán cerca de su lugar para comer y dormir hará que los asocie con sentimientos de satisfacción y comodidad.
- Sostenga el arnés, deje que su gato lo huela y ofrézcale golosinas. Luego, coloque el arnés contra el cuerpo y el cuello de su gato mientras le permite oler la golosina. Ahora, remueva el arnés y permita que coma la golosina.
- A continuación, cuelgue el arnés sobre los hombros de su gato y por el pecho entre sus patas delanteras. Recuerde- la sensación del arnés sobre el cuerpo es nueva para su gato, así que mientras tome estos pasos, ofrézcale golosinas y permita que él lo huela mientras le coloca por encima el arnés. Permita que el gato se coma la golosina y quítele de encima el arnés inmediatamente. Repita este paso hasta que pueda asegurar y abrochar el arnés.
- Póngale el arnés a su gato (pero no le abroche la correa). Ajuste el arnés. Debe haber espacio para que entren dos dedos entre el arnés y el cuerpo de su gato. Déjele puesto el arnés por un par de minutos solamente; la meta es quitárselo antes de que el gato empiece a perder interés en la golosina. Repita este entrenamiento a diario durante varios días. Si su gato se mantiene relajado cuando tiene puesto el arnés, aumente gradualmente el tiempo que se lo deja puesto. Si alguna vez se molesta, distráigalo con golosinas, y luego quítele el arnés.
- El siguiente paso es ponerle la correa. Coloque a su gato en una habitación amplia con unas cuantas cosas que podrían engancharse con una correa. Póngale el arnés y la correa, dejando que la correa se arrastre en el suelo detrás de él. Distráigalo con golosinas o juegue con él. Repita este paso durante varios días.
- Cuando vea que su gato se sienta tranquilo mientras arrastra la correa, tome la correa en mano suavemente (pero trate de no jalar), mientras camina por la casa. Permita que el gato vaya donde quiera, y mantenga la correa floja mientras usted lo sigue. Elógielo bastante y ofrézcale golosinas sabrosas como recompensa.
- Ahora puede empezar a dirigir a su gato. Empiece dentro de casa, no afuera- esto es importante, pues cuando paseen afuera, usted tendrá que dirigir a su gato: se inicia en el interior antes de salir a la calle, esto es fundamental ya que muy probablemente tendrá que dirigirlo una vez que estás fuera o Invite a su gato a seguirle usando un tono de voz suave y dulce o tírale una golosina y, mientras él la come, camine hacia el final de la correa. Cuando él le alcance, elógielo y recompensalo con otra golosina. Repita este paso vez tras vez Si su gato trata de ir hacia otra dirección, use un poquito de fuerza constante para guiarlo. NUNCA de jalones a la correa. Espere pacientemente. A penas se dirija hacia usted el gato, AFLOJE LA CORREA DE INMEDIATO. El gato aprenderá que su recompensa será que ya no habrá presión en la correa.
- La mayoría de los gatos que no han estado al aire libre se sienten nerviosos y se asustan fácilmente cuando salen, así que empiece en un lugar tranquilo y protegido y siéntese en el piso mientras tiene en mano la correa. Él va a empezar a explorar, sólo requiere un poco de tiempo para sentirse a gusto. Así como practicaron dentro de casa, empiece por seguir a su gato mientras él explora. Permita que él avance a su propio paso.
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Sugerencias en el entrenamiento para caminar con correa:
- Trate de establecer un horario regular para caminar, para que su gato no le moleste constantemente pidiéndole salir.
- Siempre póngale el arnés a su gato lejos de la puerta y cargue a su gato en brazos para salir. Nunca lo deje salir por su cuenta, pues podría tratar de salirse cualquier vez que abra la puerta, aún cuando no tenga puesto el arnés.
- Nunca le ponga el arnés a su gato si está llorando o molestando. Ignórelo hasta que esté tranquilo. Luego, puede recompensar su buen comportamiento con sacarlo a caminar.
- NUNCA ate la correa y deje a su gato afuera, incluso si tiene que dejarlo sólo por uno dos minutos. Su gato puede enredarse en la correa y lastimarse; además, no podría escapar si un perro u otro animal se le acerca. De hecho, lo mejor es no dejar a su gato al aire libre sin poder vigilarlo.
- Si su gato está frenando, encogiéndose o intenta escapar durante un paseo, lo más probable es que siente temor. Sacar a pasear a un gato temeroso no es una manera eficaz de estimularlo.